CINCO DÍAS SIN RASTROS DE FIGUEROA
El dolor de los padres de Gramaglia: “Hubiera sido un poco más digno que nos enteremos por las autoridades”
Walter Gramaglia expresó sus sensaciones a más de 100 horas sin certezas sobre el paradero del único condenado por el crimen de su hijo. El hombre reconoció que se sienten “desprotegidos” y viven momentos “de incertidumbre y de cierto recaudo”.
Este viernes se cumplirán 120 horas desde que el Servicio Penitenciario provincial advirtió la ausencia de Alberto Figueroa, quien desde 2008 estaba cumpliendo una condena a prisión perpetua por el crimen del kinesiólogo, Walter Darío Gramaglia en 2004.
Al mediodía de este jueves, las autoridades provinciales dieron una conferencia de prensa donde reconocieron que no tienen rastros ni certezas sobre dónde podría estar el hombre de 61 años. Mientras tanto, la familia de Gramaglia vive con incertidumbre el paso de tiempo.
“Han sido días de remover todo de nuevo. Es como poner el dedo en la llaga. Y sabemos lo mismo que ustedes porque oficialmente nadie se comunicó con nosotros, ni el Poder Judicial, ni el sistema carcelario, ni nadie”, transmitió Walter Gramaglia.
El hombre de 81 años vive en Córdoba junto a su esposa, Adelma de 79. A esa edad deben revivir dolores, angustias y el momento en que les quitaron la vida de su hijo de 29 años.
Con una tristeza en la voz que se siente a través del teléfono, el hombre reconoció que ahora los sentimientos son más duros: “A esta edad te imaginás que es muy, muy triste. Ya nos cayó mal lo de la pandemia, porque a esta edad, esos dos años, te pegan mucho más. Y ahora encima de esto, otro tanto. Con los años, la sensibilidad es otra”.
“El tiempo que te queda de vida también sabemos que se acorta, porque es la ley de la vida. Y tener que pasar estas situaciones es muy doloroso”, expresó a El Chorrillero.
Gramaglia volvió a exponer su malestar por el accionar de las autoridades en San Luis ante la fuga de Figueroa.
“No sé si corresponde o no, a lo mejor yo estoy pensando en que debería ser así, pero hubiera sido un poco más digno que nos enteremos por las autoridades antes que por los medios”, explicó.
En concordancia, afirmó que se sienten “complemente desprotegidos”: “Sabemos quién era la persona que se fugó, los antecedentes. ¿Cómo no vamos a estar intranquilos? Es un tipo al que no le importa nada de la vida de él y de los demás”.
Aclaró que no tienen miedo, pero consideró que la Justicia y el Gobierno “tendrían que tener un poco más de consideración para con la familia”.
“Los derechos humanos de los que tanto hacen hincapié, ¿para quiénes son? Seguramente se deben haber comunicado con Figueroa porque están para los delincuentes, no para las víctimas o los que sufren”, cuestionó.
En el mismo punto, manifestó su disconformidad con los beneficios con los que contaba el ahora prófugo porque “era un asesino, no era que había robado una bicicleta, para el colmo con toda la forma que lo hizo”.
“No sé qué consideración podrían tener para con él. Como que era un buen tipo, que no merece estar acá (por la cárcel) y lo mandaron de vacaciones a la Colonia Penal. Como un premio le dieron”, criticó.
Gramaglia dijo no tener dudas de que Figueroa “tuvo contactos externos e internos”.
“Seguramente, porque si no, no se puede ir. Yo no conozco el lugar, pero no es un lugar ni poblado. Estimo que había alguien que lo esperaba a la vuelta del lugar”, señaló.
También apuntó a la falta de medidas y de cámaras: “Con un poco más de seguridad y tecnología, lo hubieran podido captar con más facilidad. Bueno, lo cierto es que no sé qué pensar, no sé si se haya fugado y le dieron tiempo para que lo hiciera. Lo cierto es que todo coincide, los feriados de San Luis. Un montón de factores que te ponés a atarlos y todo se dio así”.
El hombre descartó la posibilidad de que Figueroa se haya quitado la vida. “Leí que lo estaban buscando en una laguna, pero no sé qué creerán, no es alguien que tendría intenciones de suicidarse ni mucho menos”, indicó.
“Vivimos un momento de incertidumbre y de cierto recaudo, no te lo voy a negar. Pero bueno, es la que nos tocó y estamos muy triste por supuesto”, concluyó.